Bienvenidos a esta iniciativa de intercambio tecnológicos.

martes, 25 de septiembre de 2012

¿Por qué insertar la robótica en la escuela?



Más allá de la diversión y el interés creciente por la robótica a nivel escolar, esta disciplina, aplicada con metodología y una orientación clara puede enriquecer y facilitar el aprendizaje de contenidos curriculares.

Entrevista a Violeta Arancibia de PENTA UC Violeta Arancibia lleva tiempo trabajando con su equipo en los fundamentos metodológicos y las formas en cómo debiera aplicarse la robótica en el contexto de la sala de clases. "La robótica en sí misma es un desafío cognitivo". Con estas palabras, Violeta Arancibia, Directora del Centro de Estudios y Desarrollo de Talentos de la Universidad Católica, PENTA UC, sintetiza la riqueza pedagógica de la robótica escolar. Y bien lo sabe Violeta. La institución que dirige está orientada a entregar una oportunidad a aquellos niños y jóvenes que provienen de lugares socialmente desaventajados, de forma que puedan desarrollar su potencial talento académico y así poder satisfacer sus necesidades educativas. Con este fin, hace casi 10 años, volvieron sus ojos e interés a la programación y a la robótica, como un medio de relevar el talento de estos niños. Experiencia que ha crecido con el tiempo. Para Violeta, la robótica, "es un excelente medio para desarrollar y aplicar contenidos de ciencias y tecnología, por medio de la resolución de problemas concretos". De esta forma, permite a los estudiantes experimentar la aplicación práctica de diferentes conceptos de física, matemáticas y tecnología, enriqueciendo y facilitando el aprendizaje de contenidos curriculares.

Robótica en la sala de clases Violeta Arancibia lleva tiempo trabajando con su equipo en los fundamentos metodológicos y las formas en cómo debiera aplicarse la robótica en el contexto de la sala de clases. En este sentido, pone énfasis en que, para que la robótica sea metodología efectiva en el aprendizaje de contenidos curriculares, es preferible trabajarla por separado, es decir, por un lado los hombres y por otro las mujeres. Esto último, porque en sus años de experiencia ha comprobado que los estudiantes trabajan y avanzan mejor, mientras lo hagan dentro de un mismo equipo de género.
Por otra parte, la directora de PENTA UC nos detalla claramente los aportes que la robótica puede hacer por el desarrollo académico e intelectual de los alumnos. Al respecto menciona 5 puntos específicos: Disciplina y rigor: por medio de la programación, la manipulación de instrumentos tecnológicos y la responsabilidad de lo que implica el trabajo en equipo, los alumnos adquieren conciencia de la importancia de ser ordenados y comprometidos con lo que se está desarrollando.
Deducción e inducción: los estudiantes trabajan ambas habilidades de forma directa. En el momento en que enfrentan un problema, buscan una solución y continúan avanzando en el desarrollo de su proyecto, utilizando toda su capacidad creativa. Abstracción: mediante el proceso de programación, los estudiantes son capaces de conceptualizar una fórmula en una acción concreta: programar el robot.
Resultado visible: la robótica permite a los estudiantes evidenciar el resultado de los procesos llevados a cabo: desde la construcción del robot, la programación de sus acciones hasta ver al robot ejecutándolas. Es decir, ven que no sólo hay una fórmula, sino también un producto. 

Trabajo en equipo: la robótica potencia el trabajo colaborativo entre pares. A lo largo del proceso, los alumnos toman conciencia de que juntos los resultados que se quieren lograr se hacen más viables.
Cuestión de motivación y desarrollo Para que los puntos antes mencionados se logren, no sólo es importante tener un alumno interesado por la robótica, sino que también, a un profesor motivado, que sepa de programación y robótica, señala Violeta Arancibia. Desde su punto de vista, la robótica debiera instaurarse en todos los colegios como un taller y no a nivel curricular, como parte de una asignatura ¿Por qué? "Porque la robótica se potencia con la participación e interés de los alumnos y no a todos los estudiantes les motiva esta actividad. Es preciso justamente, dejar de estandarizar a nuestros alumnos y velar por potenciar sus intereses y talentos individuales", explica. Arancibia enfatiza que la robótica sí es necesaria en el contexto escolar y por tanto debiera ser considerada a nivel de toma de decisiones educativas: "debemos formar científicos, como parte del desarrollo del país. Para eso, hay que comenzar por los niños, enseñándoles a programar, a abstraer acciones, a inducir y deducir, a conocer el lenguaje en otra perspectiva". "No podemos ser solo usuarios de la tecnología, sino que debemos aspirar a ser creadores de ésta".
Tomado de: http://www.educarchile.cl/